Alubias canela con gallina/potaje

Es la forma más sencilla de guisar un potaje, tan sencilla que más parece una sopa. Las calorías no sé cómo se cuentan, pero seguro que no son muchas, por lo que plena confianza en su consumo, que no vamos a tener problemas de engorde.

Qué rollo, unas veces judías, otras alubias, son lo mismo, y yo cada vez que corrijo una palabra, sigo dejando la misma pero en distinto sitio, bueno ya me entendéis,  llamadlas como os parezca, el caso es que acudan.

Elaboración:

Remojamos las alubias durante, al menos, 12 horas para que se hidraten. Una vez hecha esta operación procedemos a cocerlas partiendo de agua fría o caldo, con una cebolla entera en la que pincharemos unos clavos de olor, 2 hojas de laurel, el palo de canela  y un poco de sal. Dejamos que vayan cociendo muy lentamente.

Quemamos los pelillos que le hayan podido quedar a la gallina, la lavamos, salpimentamos y la incorporamos a la olla de las alubias. La dejamos con el resto de los ingredientes, hasta que esté muy tierna. (Por favor leed las "sugerencias útiles",  aunque sólo sea por esta vez, quizá encontréis algo "util", no es una orden, aunque lo parezca)

Partimos las verduras en un tamaño pequeño, que podamos manejar bien con la cuchara, las ponemos en la misma olla. Procuraremos que todo esté bien cubierto de agua y que cueza muy lentamente para que las judías no se deshagan.

Este potaje debe quedar clarito, como una sopa, pero si lo queremos más ligado el truco más conocido es, machacar dos o tres cucharadas de judías y echarlas al pote. Aunque con estas judías no lo vais a necesitar, ya que hacen un caldo muy ligado.

Ahora y, cada uno en nuestro plato, lo podemos rociar con un chorrito de aceite de oliva y a comer.

Plato único y calentito, de un día para otro mucho más rico.

Sugerencias útiles:

No me gusta que me partan las aves en la pollería, porque  las parten a golpes,  sus huesecillos se astillan y los encontramos por todo el guiso, pero si vuestro pollero tiene paciencia y lo hace bien, es decir, por las articulaciones, trabajo que os ahorra, porque él tiene mejores herramientas que nosotros.

Aveces la gallina es un poco dura, cuestión de la edad,  y necesita más cocción que el resto de los ingredientes, cocedla en olla exprés 15 o 20 minutos y luego, una vez frío el caldo lo seguimos cociendo con el resto de los ingredientes. 

Si no tenéis demasiado tiempo o, se os ha olvidado echar las judías en agua, podéis utilizar un bote de alubias ya cocidas.

Estas alubias si no son viejas, son muy tiernas y casi no se nota su piel.

Una observación para los que estamos acostumbrados a los compangos contundentes, este guiso es muy suave, demasiado suave,  me decía una amiga que sigue el blog, de eso se trata, tened en cuenta que lo más fuerte que lleva son las alubias, porque la verdura es lo que es y algunas de ellas aportan un sabor dulzón, como la calabaza, zanahoria o la mismísima cebolla, en cuanto a la gallina, todos sabemos que es muy nutritiva pero ligera en su conjunto. Vosotros mismos quitad o poned lo que os parezca, pero probadlo.