Carrilleras de Navidad

Las llamo así porque la primera vez que las hice fue por esas fechas, y también por los frutos que llevan, pero valen para cualquier momento, ya que estos ingredientes se encuentran en todas las épocas del año.

No obstante, personalmente, estos tipos de guisos me van más para esa época del año

Ingredientes para cuatro personas:

  • 12 carrileras de cerdo (puede ser ibérico o cerdo blanco dependerá del estado del bolsillo)
  • 3 cebollas dulces no muy grandes
  • 12 ciruelas pasas sin hueso, 12 orejones
  • 2 cucharadas de pasas sultanas
  • 1 cucharada de piñones castellanos (o de cualquier parte del país, pero nunca chinos que no saben a nada)
  • 1 palo de canela
  • 1 vaso de vino tinto, 1 copita de brandy
  • ½ litro aproximadamente de caldo de carne (puede ser de cubito)
  •  1 o 2  onzas de chocolate negro, mínimo 70% de cacao, echadlo poco a poco e ir probando hasta coger el punto que os guste.
  • 1 cucharada de mantequilla (margarina no )
  • Un poco de harina para rebozar las carrileras.
  • Aceite, sal y pimienta de molinillo

Elaboración:

Quitamos las telitas y los nervios que puedan tener las carrilleras.

Ponemos al fuego una cazuela amplia, donde quepan con comodidad las 12 carrileras, con un fondo generoso de aceite y, lo dejamos calentar.

Salpimentamos las carrileras, las pasamos por harina, sacudiendo el exceso de la misma, y las pasamos por el aceite caliente de la cazuela, sellamos ambos lados para que queden más jugosas. Bajamos el fuego y esperamos.

Picamos las cebollas en juliana y cubrimos con ellas las carrileras, echamos por encima el vino y el brandy y esperamos a que evaporen los alcoholes, e incorporamos la canela a la cocción.

Picamos a nuestro gusto (o dejamos enteras) las ciruelas y los orejones y, junto con las pasas sultanas lo añadimos a las carrilleras y dejamos que siga cociendo todo junto.

Tenemos preparado, y caliente, el caldo de carne, y lo vamos añadiendo poco a poco a la cocción, procurando que no se queden secas, pero que tampoco naden en caldo.

En el último momento de la cocción incorporamos el chocolate, puede ser derretido en el microondas, pero a mí me gusta hacerlo trocitos pequeños y que se vaya diluyendo en la salsa. También en este momento incorporamos la mantequilla, que dará a nuestra salsa un puntito brillante.

En un poco de aceite caliente tostamos los piñones, con mucho cuidado, ya sabemos que tienen la mala costumbre de quemarse al menor descuido y sin avisar.

Una vez concluida la cocción, las pasamos a una fuente de servir y repartimos por encima los piñones.

Las carrileras deben quedar muy tiernas, tanto que no necesitemos cuchillo para partirlas, de modo que recomiendo paciencia y vigilar para que no se peguen, el tiempo de cocción es bastante largo.

Sugerencias útiles:

Es opcional pasar la salsa por la batidora.

Si dejáis preparado este plato con antelación, el chocolate se lo ponéis al recalentgarlas.