Marmitako de salmón

Básicamente este marmitako es igual que el de bonito, yo he puesto aquí unas pequeñas variaciones para distinguirlo de la receta familiar. Empecé a hacer este marmitako, cuando mi Tati, que no sabe ni dónde está la cocina, pero le gusta comer bien, empezó a protestar, aunque en voz muy bajita, porque el bonito "estaba seco", esto, y la proliferación de salmón a buen precio en nuestros mercados dio lugar en mi casa a esta variación.

Es una buena comida para dejarla hecha antes de ir a la piscina y luego comerla templada, yo me colé con mi sobrino Pablo, pues era pequeño, pero no tonto, y le dije que era un plato "fresquito de verano", y con muy buenos modos, me aclaró: "esto no es fresquito, se ha quedado frío, pero está muy bueno" debía tener unos 6 años la criaturita.

Ingredientes para 4 personas

  • 600 grs. de salmón en lomos
  • 4 o 5 patatas hermosas
  • 2 ajos, ¼ de cebolla
  • ¼ de pimiento rojo, ¼ de pimiento verde
  • 1 cucharada de tomate frito, 1 hoja de laurel
  • Aceite, sal y pimienta negra en grano (6 u 8 bolitas)
  • Agua o caldo de pescado para cubrir las patatas

Elaboración:

Poner en una cazuela un fondo de aceite y antes de que se caliente, echar los pimientos y la cebolla picados y dejar que se rehoguen.

Pelar las patatas y partirlas en trozos regulares cascándolas, echarlas a la cazuela y dejar que rehoguen con el resto de las verduras, una hoja de laurel y los granos de pimienta.

Machacar los ajos en el mortero e incorporarlos al guiso, una vez todo bien rehogado añadir el caldo hasta cubrir las patatas y dejarlo a fuego suave hasta que estén tiernas.

Quitar la piel y las espinas al salmón y partirlo en dados regulares, salarlos y cuando las patatas estén casi a punto ponerlos en la cazuela, dejarlo cocer 2 o 3 minutos y se acabara de hacer con la cazuela tapada, fuera del fuego.

Probar el punto de sal y servir.

Sugerencias útiles:

A veces, en esta comida, me da la impresión de que me quedo corta de patatas, y lo suelo solucionar de una forma muy simple, bien unos huevos escalfados en el propio guiso, o unos huevos flor, que quedan la mar de vistosos.

Para medir las patatas, tengo un pequeño truco, que a lo mejor ya está descubierto, pero ahí va: pelo patatas y las voy cortando en un plato hondo, pongo en el plato la cantidad de patatas que pienso puede llevar una vez guisadas, como quiera que las patatas tienen mucha agua y yo creo que menguan, hago un plato más para la cazuela.

Marmitako de salmón marinado

Quien ha dicho que un mismo guiso no se puede hacer de distintas maneras? Yo no he sido, desde luego, Hay tantas formas de preparar un guiso, como guisanderos dispuestos a ello y el marmitako que, es un plato de visita continua en nuestra mesa, tanto en verano, que se nos queda frío, como en invierno bien calentito, cada vez sale como sale, pero siempre rico, de lo contrario no estaría aquí. No es ésta la forma más ortodoxa de prepararlo, pero a nosotros nos gusta. 

Ingredientes para 4 personas:

  • 600 grs. de salmón en lomos
  • 8 langostinos
  • 4 o 5 patatas hermosas (600/700 grs.)
  • 2 zanahorias, ½ cebolla
  • 1 vasito de salsa de soja
  • 1 vasito de vino blanco
  • 1 casco de pimiento rojo
  • 1 casco de pimiento verde
  • 1 cucharada de concentrado de tomate (o tomate frito)
  • 1 diente de ajo, rama de perejil, laurel
  • Caldo de pescado suficiente para cubrir las patatas, puede ser de brik
  • Aceite, sal y pimienta de molinillo

Elaboración:

Ponemos el salmón y los langostinos pelados en una fuente, los rociamos con la salsa de soja y los dejamos hasta el momento de echarlos al guiso.

Picamos las zanahorias, el pimiento rojo, el pimiento verde y la cebolla, a nuestro gusto, pero en trozos de un tamaño similar. Ponemos una cazuela al fuego con un fondo de aceite y echamos las verduras picadas, con un poco de sal y pimienta y las dejamos que rehoguen muy lentamente.

Pelamos y chascamos las patatas las salamos ligeramente y cuando las verduras hayan bajado un poco las incorporamos al guiso. Las damos unas vueltas por la cazuela e incorporamos el concentrado de tomate, dejamos que siga rehogándose todo junto.

Machacamos el ajo en el mortero, junto con el perejil, lo diluimos con el vino blanco y lo echamos a la cazuela, dejamos a fuego fuerte para que evapore el alcohol, mezclamos bien todo el conjunto, incorporamos la hoja de laurel. Cubrimos las patatas con el caldo y dejamos que cueza todo junto.

Ponemos una sartén al fuego, mejor que sea antiadherente, la pincelamos con un poco de aceite y una vez que esté bien caliente, salteamos ligeramente los trozos de salmón y los langostinos, cuando veamos que cambian de color los sacamos de la sartén y esperamos a que las patatas estén cocidas y en el último hervor incorporamos el pescado, apagamos el fuego y dejamos que termine de hacerse con el calor residual y la cazuela tapada.

Esta es mi segunda forma más aceptada en casa, de hacer el marmitako, probadlo que no os vais a arrepentir.

Sugerencias útiles:

Si queréis una salsa muy ligada, con unas cuantas patatas aplastadas lo conseguiréis.

El punto del pescado siempre será a vuestro gusto, en nuestro caso nos gusta poco hecho, pero si lo queréis más pasado sólo hay que darle más candela.