Patatas y mejillones a la brava

Esta es una de las mil maneras que tenemos de utilizar la salsa brava que, para mí, como con patatas con nada, ya que al ser una salsa potente enmascara el sabor de cualquier otro producto, pero como las patatas son más bien tirando a sositas, nos lo podemos permitir.

Ingredientes para un aperitivo:

  • 12 mejillones
  • 12 arandelas de patata de un dedo de grosor
  • Salsa brava
  • Aceite y sal

Elaboración:

Preparamos la "salsa brava"

Cocemos 3 o 4 minutos las arandelas de patata a fuego lento para que no se rompan. Las sacamos del agua y las ponemos sobre un papel de cocina para que se sequen, las salpimentamos y reservamos.

Ponemos una sartén al fuego con un poco de aceite y vamos friendo las patatas, siempre procurando que no se rompan. Una vez fritas las mojamos en la salsa brava y las colocamos sobre la fuente donde vayamos a servirlas, que previamente hemos untado con salsa brava.

Limpiamos los mejillones y los abrimos en una cazuela con un poco de cerveza, sacamos los bichos y los pasamos por una plancha bien caliente vuelta y vuelta.

Los vamos colocando encima de las arandelas de patata que estarán cubiertas de salsa brava, para sujetarlos, si es preciso les ponemos un palillo.

Si sois de los que os gusta rabiar con el picante, poned una salsera aparte con el resto de la salsa, y no se os olvide una buena cerveza.

Sugerencias útiles:

Tanto los mejillones como las patatas, podemos tener que desechar alguno o se nos puede romper una patata, por lo que sugiero estar preparados con alguna unidad de más, y si finalmente todos llegan a buen puerto, el cocinero tiene que probarlos.