Ropa vieja de cocido

El plato de aprovechamiento por excelencia. Podemos reunir los restos de cocido en una fuente, tal cual, colocarlos en la mesa, al lado una salsa de tomate y se acabó el trabajo en la cocina. Pero a nada que nos esforcemos un poco, vamos a conseguir un plato digno de chuparnos los dedos, sólo es necesario un poquito de curre para que: ¡Tachannnn! los restos se trasformen.

Ingredientes:

Convencer a los comensales para que no coman demasiado, por muy bueno que esté el cocido, y procurar que quede un poco de todas las carnes utilizadas, así como garbanzos, patatas y verduras y por supuestísimo tocino. Apartar todos los sobrantes cuanto más enteros mejor y, si van a esperar un par de días antes de reutilizarlos cubrirlos con un poco de caldo del cocido y conservarlos en la nevera.

  • ½ cebolla picada en juliana.
  • 1 ajo
  • 1 cucharadita pequeña de pimentón.
  • 1 chorrito de vino blanco
  • 1 pizca de comino en polvo
  • Aceite, sal y pimienta recién molida

Elaboración:

Ponemos una sartén al fuego con un fondito de aceite y rehogamos la cebolla a fuego vivo, si nos ha sobrado tocino lo incluimos en este sofrito, pero podemos no utilizarlo.

Machacamos el ajo en el mortero y se lo incorporamos a la cebolla.

Una vez rehogados la cebolla y el ajo apartamos del fuego añadimos el pimentón.

Partimos lo más vistosos posible todos los restos, los añadimos a la sartén y dejamos rehogar todo junto un par de minutos, lo espolvoreamos con una pizca de comino en polvo y un chorrito de vino.

Debe quedar jugoso, ni caldoso ni seco, por lo que será a nuestro gusto añadir o no, parte del caldo de cocido que nos ha sobrado.

Ahí tenemos nuestra ropa vieja, que dependiendo de la cantidad puede ser un plato único, siempre acompañado de pan, un día es un día.

Si nos ha sobrado caldo suficiente, bien calentito y colado, para acompañar a este plato, será una comida redonda y, para que os voy a contar si  incluimos unos huevos fritos.

Sugerencias útiles:

Hay quien añade al sofrito una cucharada de tomate. en mi caso no lo hago, porque me gusta añadir un poco de caldo y,  caldo con tomate, como que no me va. Pero hay mucha gente que lo hacen y da, por lo visto,  buen resultado. 

Con los restos de cocido podemos hacer varios platos que nos parecerán distintos en cada momento, la próxima vez que ponga un puchero procuraré que me sobre para hacer: croquetas, albóndigas, humus (sólo con los garbanzos, patatas y verduras). Y Si tenéis alguno más espero que me los paséis, pues me encanta la variación.