Conejo en salsa de tomate

Es un plato fácil, lleno de sabor y, si ya tenéis la salsa hecha,  muy rápido. Dicen que la carne de conejo es muy sana y yo no lo pongo en duda pero, por ser criados en granja, al igual que los pollos,  los someto a los mismos cuidados higiénicos, es decir limpiar el lugar de trabajo antes de dejar en el mismo otro alimento, cuidado con las bayetas y paños de cocina  (mejor usar papel de cocina). 

Elaboración:

Partimos el conejo en trozos, 12 me han salido a mí, los salpimentamos y reservamos,

Ponemos una cazuela amplia al fuego, con un fondo de aceite, y antes de que humee, echamos los trozos de conejo los rehogamos, y los rociamos con un chorrito de vino blanco.

Cuando haya evaporado el alcohol, lo cubrimos con la "salsa de tomate"

Dejamos que cueza todo junto a fuego muy lento unos 25 minutos, lo retiramos del fuego y servimos.

En este caso y como tengo exceso de calabacines, lo acompañaré con unas ruedas de calabacín a la plancha, pero en mi casa lo que tiene mejor acogida son las patatas fritas.

Sugerencias útiles:

La salsa de tomate que os recomiendo lleva ya hortalizas en su composición, si no queréis entreteneros en hacerla, podéis incluir los ingredientes en la cazuela y se van haciendo al mismo tiempo que el conejo, después retiráis las tajadas de conejo y pasáis la salsa por la minipimer, para que os quede más fina, o dejarlo tal cual, a vuestro gusto.

Yo lo hago así porque "Salsa de tomate" tengo siempre en casa.