Pikillos y pencas rellenas de pisto
Este plato pretende ser un ejemplo de que no tirando nada, podemos conseguir un segundo o un entrante económico y de paso el cubo de la basura no recibe restos que para algunas personas resultan valiosos. No es que con esto solucionemos algo, pero es cuestión de solidaridad
He querido para dar
más sabor al plato poner unas anchoas en el relleno, podéis poner unas migas de
bonito, cualquier cosa que os guste, incluso sólo el pisto, y puede ser
perfectamente un plato vegetariano.
Ingredientes hasta donde lleguen, en este caso:
- 4 pimientos del piquillo
- 4 pencas de acelga
- restos de un "pisto a mi estilo", aproximadamente 1 taza grande
- 1 anchoa en cada relleno, o picáis unas cuantas y las mezcláis con el pisto
- Harina para rebozar
- 1 huevo, aceite y sal
Para la salsa: los restos de un "crema de calabaza"
Elaboración:
Limpiamos las pencas de acelga como tengamos por costumbre y las partimos en 8 trozos iguales, las cocemos partiendo de agua fría con sal hasta que estén a nuestro gusto. Una vez cocidas las escurrimos y secamos ligeramente con papel de cocina.
Sacamos los pimientos del piquillo de su bote y los dejamos escurriendo. Incluso podemos repasarlos con papel de cocina.
Mezclamos, si nos viene bien, el pisto con algo que le dé más sabor.
Con las pencas cocidas y los pimientos escurridos, comenzamos la tarea de rellenarlos, con ayuda de una cuchara, vamos rellenando cada pimiento y ponemos en su interior una anchoa, hacemos lo mismo con las pencas, y una vez rellena la de la base la tapamos con la que nos que, sin olvidar, si nos gusta, la anchoa o lo que hayamos elegido.
Batimos 1 huevo y ponemos harina en un plato suficiente para rebozar y ahora ayudándonos con las manos rebozamos primero en harina, posteriormente en huevo y a continuación los freímos en aceite a temperatura media, los ponemos en papel de cocina para que escurran el exceso de grasa.
La salsa ya os digo que fue un resto de crema de calabaza, pero puede ser "tomate frito" o si tenéis ganas "salsa para pimientos rellenos".
Hasta aquí hemos llegado con un plato de aprovechamientos que, podéis hacer partiendo de cero, es decir comprando y haciendo todos los pasos desde el principio.
Sugerencias útiles:
La única, no tiréis nada en la cocina, casi todo puede tener una segunda y hasta tercera oportunidad y aunque sé que lo sabéis, el bolsillo lo agradece.